miércoles, 15 de febrero de 2017

RODEO

Hoy es uno de esos días en los que los Comensales Furtivos se visten una colorida chaquetilla de cocinero que roza la originalidad con lo hortera, se colocan las gafas de sol que atenúan su intimidante mirada y, fruto de una explosiva mezcla entre Alberto Chicote y Risto Mejide, se disponen a criticar y evaluar de forma furtiva el restaurante: Rodeo. 

Recordad que a final de año galardonaremos con el prestigioso trofeo Restaurante Furtivo a aquel que nos sorprenda gratamente, aquel que consiga pasar todas y cada una de nuestras estrictas exigencias culinarias, aquel que noquee nuestro paladar más delicado, aquel que nos haga experimentar una experiencia furtivamente gastronómica. 


LOCALIZACION

(OJO: Rodeo se trata de una cadena de restaurantes, el que se está evaluando por los Comensales Furtivos es: Restaurante Rodeo de Hondarribia).
El lugar donde se encuentra ubicado es sumamente atractivo. Se trata de un amplio espacio acristalado y luminoso situado frente al nuevo puerto deportivo de Hondarribia. Un lugar muy transitado de normal en el que, tanto en invierno como en verano, los visitantes aprovechan las terrazas de los bares y restaurantes, tales como la del restaurante Rodeo, para disfrutar de la tranquilidad del ambiente, próximo a la playa, mientras saborean su consumición. 

DATO: Hondarribia es un pueblo situado en la costa Gipuzkoana a escasos 23 km de la capital, Donostia- San Sebastián. Se recomienda transitar tanto por las calles de la parte vieja, la zona céntrica repleta de bares y coloridos balcones tradicionales y el nuevo puerto deportivo donde poder respirar el bien tan anhelado últimamente: paz













NOTA: 8.5

DECORACION

Como se acaba de exponer anteriormente, nos encontramos ante un espacio acristalado que da paso a una fuerte e intensa entrada de luz durante el día, lo que se agradece y suma puntos (o décimas) a la hora de evaluarlo. 
La decoración se podría denominar algo así como rústico- moderno (término sacado del diccionario propio de los Comensales Furtivos); mesas y sillas originales y de buena calidad, multitud de detalles que ayudan al espacio a ser mas acogedor, como: flores plantadas en pequeñas tazas y una variedad de bombillas colgadas del techo que iluminan el espacio cuando cae la luz.

Uno de los detalles originales que se puede encontrar en el Rodeo es la carta. Dos trozos de cartón encuadernados bien con arandelas o cuerdas, donde a través de ilustraciones y texto se especifica lo que el restaurante ofrece.  

NOTA: 8.5

SERVICIO

¿Habrán sido bordes con nosotros? ¿Demasiadas florituras que te terminan creando miedo de terminarte tu copa de agua por si el camarero se da cuenta y viene a rellenártela?...

Nada de eso. El trato por parte de los/las camareros/as ha sido cercano y amable en todo momento. Sacaríamos nuestro lado más Risto para poder hacer una dura crítica hacia el servicio, pero mentiríamos ya que no nos dieron motivos para ello. 
(Como os estaréis dando cuenta, vamos de duros pero no lo somos tanto… ¿o sí?

NOTA: 9

ALIMENTOS

A grandes rasgos, para que os podais hacer una idea, lo que se puede pedir en el restaurante es: hamburguesas, perritos calientes, sándwiches, nachos, ensaladas… (Lo que nosotros pedimos fue: Nachos con queso y hamburguesa Rodeo (una hamburguesa con tomate, lechuga, cebolla caramelizada y salsa guacamole).

Las raciones se podrían calificar como consistentes. Esto es, ni rancias que te dejan más que con hambre, ni pesadas, aquellas que te hacen sufrir pensando que todavía te queda más de la mitad para terminar.

La calidad de los alimentos es buena. La ración de nachos se nota que ha sido elaborada y no un

as patatas minúsculos trozos de queso y dos gotitas de salsa a lo que denominan: ración de nachos con queso. La carne de la hamburguesa es muy sabrosa y bien hecha, esto es, en su punto (a no ser que tu petición sea más o menos hecha).

Dejando a Risto nos gustaría pasarnos nuestro lado más Chicote para decir que los alimentos son congelados, que la hamburguesa está más seca que la suela de una zapatilla y el escurridizo queso de los nachos es el más barato del Mercadona. Pero no, con mucha lástima tendremos que dejaros estas críticas para el siguiente restaurante examinado (que se prepare...).

NOTA: 8

PRECIO

No se trata de un sitio barato, ni excesivamente caro. Para que os podáis hacer una idea, si vais dos personas y pedís un entrante (como puede ser la ración de nachos) y una hamburguesa para cada uno, el precio final rondara los 30€. Igual no es un sitio donde ir cada semana, pero la relación calidad precio, merece la pena.

NOTA: 7

NOTA FINAL

Tan tan tan taaaaan…. Llega el momento decisivo. Tras haber evaluado todos y cada uno de los ítems, los Comensales Furtivos han decidido que la nota final del Restaurante Rodeo sea un…

8.2

Desde el Blog: Comensales Furtivos queremos dar la enorabuena al Restaurante Rodeo de Hondarribia y agradecerles su servicio y buenos alimentos. Chicos/as habeis aprobado el extricto y riguroso examen realizado por estos Furtivos, ¡FELICIDADES!. 

sábado, 4 de febrero de 2017

Bacalao al pil pil que siempre sale bien (incluye trucos)

Tras casi 2 años de parón y obligado por los compañeros del curro, retomamos la actividad de Comensales Furtivos con una receta tradicional pero a la que podemos darle ciertos giros de manera que bordemos la receta siempre que la hagamos (Creedme incrédulos, creedme!!)

Antes de empezar, hablemos del resultado; ¿Cómo tiene que ser un buen bacalao al pil pil?. Creo que la mayoría coincidiríamos en la respuesta: tajadas de bacalao gordas que se les separan las lascas, pero todavía con textura y con el punto justo de sal y una salsa gorda gorda de esas que haga falta cuchara (y no te deje dormir por la noche...) y bien aromatizada con ajo y guindilla.

Así pues, existen  2 maneras para hacer la receta:
 - La tradicional, como el misionero, en la que desde el principio tenemos todo en el fuego y, mientras rezamos lo que sepamos, se mueve todo para que engorde la salsa...

 - La de comensales furtivos; dejamos el bacalao al punto, quedando el aceite lleno de gelatina, ligamos el pil pil en un plis plas, presentamos, cenamos y triunfamos.

Ingredientes para 4 personas:

4 tajadas       Bacalao de calidad desalado con piel
2-3 dientes     Ajo
                Guindilla (cayena o guindilla seca)
                Aceite de oliva virgen a kaskoporro (400-450ml)

Preparación de la maravilla:

Comenzamos, pelando y cortando los ajos; mi consejo, en rodajas finas pero con mordida; ni que sea papel de ajo ni medios ajos.

Así, vamos con el primer truco (del almendruco) de la receta, poniendo a calentar el aceite (Aceite de oliva virgen del bueno, por favor...) en un cazo o recipiente alto donde después lleguemos a CUBRIR el bacalao, aunque tengamos que hacerlo en un par de tandas. En este aceite, a fuego medio, echamos el ajo y la guindilla (en trocitos si es guindilla seca) hasta dejar el ajo al punto. (TRUCO: Fuego medio y cuando empiece a flotar 2-3 min) En este momento, sacamos el ajo a un papel absorvente y retiramos el aceite del fuego.

La mayoría de vosotros, en este punto, echaríais el bacalao, lo freiríais y os dejaríais los brazos intentando ligar lo inligable. Ésto es como intentar ligar con Scarlet Johanson invitándola a una copa, es decir, imposible...

En este momento, habría que poner el bacalao en el aceite, con la piel hacia arriba y ponemos al fuego. Aquí viene el segundo y definitivo truco: no vamos a freír el bacalao, vamos a confitarlo, es decir, "freírlo" a una temperatura de unos 60-65ºC. A ésta temperatura, no veremos burbujitas como cuando freímos, simplemente veremos cómo el bacalao se va cocinando y va soltando gelatina.

Aquí es dónde nos ponemos técnicos:
¿Cuánto son 60-65ºC?
Si no tienes un termómetro, puedes meter el dedo; quema un poco, pero puedes mantenerlo un rato en el aceite.
¿Cuál es el punto para el bacalao?
El punto perfecto para el bacalao, es ese en el que apretando la piel con el dedo, ésta se rompe sin hacer fuerza. Además, podrás empezar a ver cómo las lascas se empiezan a separar.
¿Qué hago mientas se hace?
Te puedes tomar un vino, coca cola, gin tonic o incluso puedes intentar pedir "mimos" a la parienta, aunque lo del vino es más seguro.

En este paso veremos cómo el bacalao suelta toda su gelatina en forma de bolitas por toda la superficie (magma supremo del pil pil).

Cuando el bacalao esté al punto, lo retiramos a un plato y dejamos que el aceite se enfríe; cuanto más mejor, pero no le eches unos hielos y te lo tomes, que eso era el gin tonic...

Ahora sí sacaremos la cazuela baja y grande (la de toda la vida para el pil pil) donde vamos a montarlo. Por una parte tenemos los ajos y guindilla, por otro el aceite lleno de gelatina y frío y por otro, el bacalao en su punto.

Cogemos el líquido que ha soltado el bacalao tras reposar en el plato y lo ponemos en el fondo de la cazuela y junto a un poco del aceite, empezamos a mover; lo mejor, con unas varillas o colador. Veremos como a la mínima de batir el aceite ligará. Así pues, iremos añadiendo el aceite a hilo (no del tanga) mientras movemos el colador/varillas por abajo hasta ligar todo el pil pil. Con la emoción del momento, se me ha olvidado sacar fotos de la técnica del colador...

Si el aceite está lo suficientemente frío, en 5 minutos puedes ligar toda la cantidad de aceite sin problemas.

En éste último punto, colocaríamos el bacalao en la cazuela y le daremos un calentón (al pil pil, recuerda que la parienta te ha dicho que no) a fuego suave hasta calentarlo todo mientras movemos envolventemente. No os emocionéis y pongáis el fuego a tope, porque se desligará nuestra maravillosa salsa.

En el último momento, ponemos los ajos y guindilla por encima y presentamos.
Si os pasa como a mí y os sobra pil pil para embotar, antes que echarlo por la fregadera atascando las tuberías, utilizadlo como aceite para el aliño de una ensalada, para un pescado a la plancha o simplemente comeoslo a cucharadas. 
¡¡Viva el bacalao y el aceite de oliva!!